La ciudad aspira a igualar y superar los 40.000 espectadores en su debut como sede mundial de SailGP, que dejó un impacto económico de unos 20 millones de euros
"Es un honor para mí unirme a Porsche y formar parte del equipo en su retorno a la máxima categoría de Le Mans. Estoy impaciente por pilotar uno de los prototipos más rápidos del mundo", ha manifestado Webber